¿El último que apague la luz? La incertidumbre del Pro
El derrumbe electoral en CABA reconfigura el escenario en Villa María.
La elección de legisladores porteños dejó un dato clave para la política nacional; el PRO, el partido que durante años tuvo a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires como su bastión, cayó al tercer puesto detrás de La Libertad Avanza y de un peronismo que, pese a estar fragmentado, logró posicionarse por encima del partido amarillo.
Este resultado genera efectos dominó que llegan hasta el interior del país, y Villa María no es la excepción. Hace unos meses, en nuestro portal dábamos cuenta de un gesto simbólico pero cargado de sentido; el cambio de color de la sede local del PRO. Lejos del tradicional amarillo, el espacio mutó visualmente, quizás anticipando una transformación más profunda.
Con este nuevo panorama, la gran pregunta que empieza a circular es: ¿Qué rumbo tomarán los dirigentes locales que hasta ahora se referenciaban en el PRO?
En Villa María, el nombre más resonante del espacio ha sido el de Darío Capitani. Su rol como referente del PRO local fue indiscutido durante años, ahora cercano al Gobernador Llaryora o presidiendo la Agencia Córdoba Turismo.
También se suman a la incógnita los nombres de Karina Bruno y Natalia González, quienes en su momento surgieron del mismo espacio político. La pregunta que se impone ahora es qué rumbo tomarán en este nuevo escenario: ¿seguirán acompañando a su referente local o elegirán abrirse camino por otro lado?
¿Se terminó el PRO como opción política nacional y, por consiguiente, local? ¿Buscarán sus referentes sumarse a otros espacios o reinventarse dentro del mapa político de la ciudad? Por ahora, reina la cautela y el silencio, pero los próximos movimientos podrían marcar un punto de quiebre en la configuración política villamariense.
¿En crisis el PRO villamariense? Capitani propone un cambio de estrategia