Investigan posible contaminación en el río Ctalamochita

Vecinos de Villa María han elevado su preocupación ante las autoridades municipales y provinciales por una posible contaminación en el río Ctalamochita.

Durante los últimos días, varios residentes han detectado un cambio en el color del agua, acompañado por un fuerte olor y la presencia de peces muertos en distintas zonas del río. Estos indicios apuntan a un posible vertido de residuos tóxicos, afectando tanto a la fauna local como a la salud de los ciudadanos que utilizan el río para actividades recreativas.

La denuncia fue realizada por un grupo de vecinos que frecuentan la costanera y han sido testigos del deterioro visible del estado del agua. En sus declaraciones, los residentes aseguraron que este fenómeno es reciente y se ha intensificado en las últimas semanas. “Antes solíamos disfrutar de la costanera y el río, pero ahora el olor es insoportable y nos preocupa lo que podría significar para nuestra salud”,  una de las denunciantes.

Las autoridades locales, junto con el Ente de Control Ambiental, han comenzado una investigación para determinar el origen de la contaminación. Se están tomando muestras del agua para analizarlas en laboratorio y determinar si el problema está relacionado con algún tipo de vertido ilegal de una industria cercana o con un problema en el tratamiento de residuos urbanos. Los funcionarios aseguraron que se tomarán todas las medidas necesarias para proteger el medio ambiente y la salud de los vecinos.

Por su parte, el intendente de Villa María, Eduardo Accastello, manifestó que se actuará con firmeza para determinar responsabilidades. “No podemos permitir que nuestro río, una de las principales fuentes de vida y recreación de la ciudad, sea dañado de esta manera. Tomaremos las medidas necesarias para identificar y sancionar a los responsables, si se confirma la contaminación”, señaló el intendente.

Mientras se esperan los resultados de los estudios, las autoridades han pedido a los ciudadanos que eviten el contacto con el agua del río y que no consuman peces capturados en la zona afectada. La comunidad se mantiene alerta, esperando que se aclaren las causas de la posible contaminación y que se tomen las acciones necesarias para revertir el daño causado.

Esta situación ha generado un debate entre los vecinos sobre la necesidad de contar con mayores controles ambientales para prevenir este tipo de incidentes en el futuro. Organizaciones locales han convocado a una reunión en la costanera para discutir posibles acciones de concientización y exigir mayor transparencia en la gestión del medio ambiente de la ciudad.

Fuente: El Diario

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