Denuncian falta de baranda reglamentaria y obligatoria en rampa para discapacitados en el Museo Bonfiglioli
Vecinos de la ciudad enviaron una denuncia en donde se puede observar la rampa de acceso ubicada en el Museo de Bellas Artes Fernando Bonfiglioli, sin la medidas de seguridad obligatorias.
Sin embargo, esta rampa carece de una baranda reglamentaria y obligatoria, lo cual representa un grave incumplimiento de las normativas de accesibilidad y una amenaza potencial para la seguridad de los usuarios, especialmente aquellos con discapacidades.
La rampa visible en la fotografía carece de cualquier tipo de baranda o pasamanos. Esto es particularmente preocupante ya que las barandas son esenciales para proporcionar apoyo y estabilidad a las personas con movilidad reducida.
La ausencia de barandas puede resultar en accidentes graves, especialmente para personas en sillas de ruedas, personas mayores, o cualquier individuo que necesite apoyo adicional para desplazarse.
Normativas y recomendaciones
Según las normativas vigentes en materia de accesibilidad y construcción, todas las rampas deben estar equipadas con barandas a ambos lados. Estas barandas deben ser continuas y tener una altura adecuada que permita un agarre seguro.
Las barandas deben tener un diseño que permita un fácil agarre y ser resistentes para soportar el peso de una persona que pueda necesitar apoyarse con fuerza.
Riesgos asociados
La falta de una baranda reglamentaria no solo incumple las normativas, sino que también pone en riesgo la integridad física de las personas. Un resbalón o una pérdida de equilibrio en una rampa sin baranda puede tener consecuencias graves.
Además, la falta de estas medidas de seguridad puede desalentar a personas con discapacidades a visitar el museo, limitando su acceso a la cultura y el arte, y violando sus derechos de accesibilidad.
En conclusión, la falta de barandas en la rampa del Museo Bonfiglioli representa una seria deficiencia en términos de accesibilidad y seguridad. La pronta instalación de estas barandas no solo es un cumplimiento legal, sino un paso necesario para garantizar la seguridad y comodidad de todos los visitantes del museo.